Archivo de cansancios

Medicación

Posted in El mismo verso with tags , , , , , , , , , , , , , , , , , , on 18 marzo, 2022 by nene

Lo otro son giladas:

un par de ataques de pánico

(panic attacks, para los chetos)

y la loquera sonriendo,

disfrutando

mientras firma las recetas,

porque sabe,

siempre supo

que vos

y otros tantos como vos

son solo una mínima porción

de su dinero.

Lo jodido

son los sueños

sin dueño

que no podés separar de la vigilia,

esa otra angustia

que controlás a duras penas

porque desconocés,

no tenés ni puta idea

de hacia dónde va la vida

y por qué es que nunca

lo hace en línea recta.

Así que tal parece

que aquí se acaba el cuento este.

Pero esperá, que el colofón

son las desesperaciones

que no ubicás

entre los muchos miedos cotidianos,

que no sabés de dónde

mierda vienen.

Hay tantas cosas de vos mismo

que aún desconocés…

Así que, ¿por qué tendrías que saberlo?

No quieras entender. No intentes entender.

Mejor quédate con el vuelto.

vereda

Posted in El mismo verso, Lo siento, Shéneral with tags , , , , , , , , , , , , , , , , , on 29 octubre, 2009 by nene

vereda

algunas veces
(no te voy a engañar)
yo paso por tu casa
y juego a imaginarme
que salís por la ventana
y sonreís sin hablar.
algunas veces me equivoco,
o me olvido que vos ya me olvidaste
y voy caminando despacito,
comiéndome centímetro
a centímetro las baldosas
y los pasos que doy por la vereda
hasta llegar justo debajo
de donde está, abierta
como un mundo tu ventana.
y no salís.

sos vos la que no está.

cuando llego a la esquina
me doy vuelta,
esperando que las cosas,
todo lo que imagino
se haga realidad.
y vos nunca salís.
no veo ni siquiera
tu sombra moverse
detrás de las cortinas
o dentro de la casa.
no veo a tu gato, ni escucho
esa música de mierda
que escuchás y es raro;
tampoco puedo sentir nada.
dolor, angustia o lágrimas.
no puedo sentir nada.

sos vos la que no está.

yo creo que los días,
las horas,
las semanas
me dejaron de lado como siempre.
yo creo que la gente
tiene razón cuando me dice
que la memoria termina
por matar a los más débiles,
y entonces miro el piso,
las baldosas,
la vereda de tu casa.
y me voy sin escuchar,
sin sentir cosas bonitas.
me voy sin decir nada.
y creo que vos nunca estuviste.

sos vos la que no está.

Los Lombroso

Posted in Lo siento, Otras cosas, Shéneral with tags , , , , , , , , , , , on 8 octubre, 2009 by nene

cesar lombroso

 

En los vagabundos adviértese la carencia de
caracteres físicos (como senos frontales, mandíbulas
voluminosas),
que pudieran tomarse
como signos de energía y la presencia, por el
contrario, de otras anomalías (las hernias, por
ejemplo),
reveladoras de debilidad física y moral.

«Los Criminales» – Césare Lombroso – 1876

 

Andá a caminar por Duarte Quirós a las 5 de la tarde de un día de semana si, por causa o maldición del azar o de tu vieja, se te ha ocurrido nacer con piel oscura, ser bolitaperucaparaguayo, o tenés el labio inferior un poquitito prominente, o ropa vieja, o estás sucio, o por casualidad andás sin documento o tenés el mal orto de vivir en Las Violetas o Los Álamos…!
Ellos siempre están ahí, y en el mismísimo momento en que te sentís tranquilo, seguro y bien cuidado se te viene encima la jauría de pitufos, la jauría de no sé quiénes, no sé cuándo y las manos contra el movil, y qué andás haciendo por aquí y ésas zapatillas, adónde las compraste y vení conmigo y a comerse el viaje de una noche de placer al paraíso, botas, gritos, risas y «efectos personales extraviados».

Los azules siempre están.
Andá sabiendo: esos señores que han pasado a cada rato por tu casa, si estuviste sentado en la vereda, no es que anden de paseo.
En realidad, te están fichando.
Ellos son los dueños verdaderos, de ellos es tu de-ene-i , los cordones de tus zapas, tus muñecas, la poca dignidad que te ha ido quedando.
Al caer y rodearte, como rodean las hienas rodean un cadáver que se pudre, comienzan las preguntas de rutina, las sonrisas cínicas, las forreadas, los malos tratos. 
Si estás parado contra el móvil y sentís que se te hiela hasta el upite y las gambas te están temblando, ni se te ocurra confesarlo. No hay nada más cómico para ellos, libres portadores de juguetes caros, que un pibito que se mea de miedo en una esquina.
No hay nada que les cause más placer que «jugarse la vida» contra un pibito al que forrean porque está sentado en el cordón de la vereda, tranquilo, fumando.

Y preparáte si por casualidad querés saber qué has hecho, de qué te están acusando!
Es un insulto, un desafío a la autoridad que representan, una burla, un agravio!
Ese es el pase directo a un viaje a lo inesperado. Resolvélo en la Primera o en la Cuarta, en Nueva Córdoba, y después, sin escalas, directo a la Alcaidía, a doscientos mil kilómetros de casa y sin nadie que te ayude.
Resolvélo vos solito contra el mundo. A lo macho.

Y desconfiá del que la juega de buenito. Ése es el que se queda con tus cosas, las monedas, los cospeles, los puchos. Y si entraste con algo de valor, alpiste. Ya te podés ir olvidando.
El buenito es el que te dice que podría ser peor, que qué suerte que tenés que no fuiste directo a leonera, con violetas, pungas, chorros de caño. Y cuando entrés en confianza dejá eso acá yo te lo cuido hasta que vuelvas, te lo entrego cuando salgas, andá tranquilo, ñato.
Olvidáte.
El buenito es el peor bicho de ahí adentro. Porque no tiene ni pelotas. Está ahí porque nunca tuvo aguante.
Seguro que lo pasan. Seguro que la mujer tiene otro guaso.

Y si te pudiste bancar pasar la noche entera entre olor a mierda, meos, vaguitos que gritan cagándose de risa, si te bancaste el cagazo de lo que has vivido y salís para contarlo, que no se te ocurra hacer demanda, que no se te ocurra recordar el nombre de los que te levantaron!
Ese es el abono gratis para todo el año, la suscripción al club nocturno azul, la ficha de inscripción, el pase inmediato.

Asi que mejor esperá que cambie la historieta, que se muden o que asciendan, o los trasladen a otro barrio.
Y tranqui. Olvidáte, hasta que a otro se le dé por preguntarte por qué no sos tan rubio, por qué no has ido al trabajo o a la escuela. Por qué no estás tan bien vestido ni arreglado.

Si leíste esto y todavía no viviste lo que digo, te aconsejo que camines con cuidado.
Si te parece que esto ha sido como un puto dèja vú, yo te saludo:

«Bienvenido al Club de Don Lombroso»

Y buena suerte, chango.

tired and tied

Posted in El mismo verso, Lo siento, Otras cosas, Shéneral with tags , , , , , , , , , , , , on 3 octubre, 2009 by nene

ahorcado

boiling out mi cabecita las cositas que jamás pude olvidar
sending back to a blank space la valentía que hace tiempo no uso más
if I mess around with la memoria selectiva maybe pueda silenciar
esas sirenas dentro mío que you know no dejan nunca de sonar
thinkin’ ‘bout myself or los recuerdos que me vienen a buscar
me my parents las heridas los amores que no estaban ni estarán
checking out el gas la luz la fiebre intensa en mi cabeza
la belleza de un piquete de gendarmes que me quieren encanar
 
algo se acumula en esta piel y en estos huesos
something that just happens cuando quiero abandonar

soy el gato gaudio un gato caro the super power kid el mandamás
la mierda que comprás en pepelitos el triste sueño eterno
la revolución de un bromatólogo comiendo choripán.
soy un nigga rapper un leader dealer un chango allá en bolivia
mendigando moneditas para comprar para morfar
un trip sin beggining ni finales las edades que no tengo

una guitarra en un Do 7 un quilombo de signos y señales
un nudo vial que no te lleva nunca y que no va a ningún lugar

Efemérides boludas III

Posted in Otras cosas, Shéneral with tags , , , , , , , on 15 julio, 2009 by nene

gauchos

 

En Julio de 1971, y coincidiendo con la visita a la boite «La Fusa» de Buenos Aires del genial Vinicius de Morães, junto a su parceiro Toquinho y la cálida María Creuza, en la provincia de Jujuy se crea la primera «Scola do Samba» de Argentina, anticipándose a lo que luego sería el circuito principal de las fiestas carnavalescas, en Gualeguaychú, provincia de Entre Ríos.
Sin embargo, la aventura del carnaval carioca en el noroeste del país duraría sólo un lustro, para ser reflotado recién a principios de la década del ’80.
Las causas? Una feroz interna entre los integrantes de la comisión directiva, algunos dispuestos a conservar el espíritu de las «Scolas» brasileras, en tanto que otros (en su mayoría), pugnando por introducir a la comparsa el espíritu tradicionalista de la provincia.
Esto motivó la ruptura de la comisión en dos facciones, una conservadora y otra que pretendía cambios en la presentación de las escuadras.
No obstante el decaimiento del entusiasmo inicial, la comparsa siguió con sus presentaciones los años subsiguientes (y hasta 1976), aunque por mayoría de aquellos directivos que pretendían la introducción del espíritu gauchesco en el carnaval, lo hizo bajo un nombre bastante elocuente:

 

«Scola do Samba de mi Esperanza»

 

 

(foto gauchos: Daniel Espejo)

a veces

Posted in El mismo verso, Lo siento, Shéneral with tags , , , , , , , , , , , , , , , , , , , on 21 octubre, 2008 by nene

 

sabés que sí,
que a veces yo también
hundo la jeta en una almohada
y lloro por las cosas que perdí,
y por todo lo que sé
que ya no tiene solución
pero igual me deja un hueco
aquí en el alma?
sabés que sí,
que en ciertas noches
salgo a caminar con rumbo nada
y me voy preguntando a cada rato
si estuvo bien esta vida que viví
si es que soy buena persona
o si soy una cagada,
si estas cosas grises las merezco,
si está bien estar despierto hasta que ya
no queda más que morfar la madrugada?
sabés que sí,
que a veces tengo ganas
de meter la cabeza bajo el piso,
de enterrarme debajo de la cama
y esperar al menos cinco años
hasta que ya no haya más lágrimas?

a veces tengo
esta y otras sensaciones
aquí, dentro del pecho.
a veces siento
que todo lo que hago o vaya a hacer
va a ser inútil.
entonces rezo.
no sé cómo
(tampoco sé el por qué),
pero junto las manos
y bajo la cabeza
en señal de rendición.
y rezo.

y dios nunca contesta,
o yo anoté mal su teléfono
y estoy marcando al pedo
y no haya solución
para absolutamente
nada.

córdobah

Posted in El mismo verso, Lo siento, Shéneral with tags , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , on 13 octubre, 2008 by nene


El concierto de la tarde
se refleja en edificios mudos,
contra el cielo que se esconde
en el ocaso, como un animal.

«Se convirtió en la noche» – Luis Alberto Spinetta  

córdoba,
vos que sabés
que cuando hay nubes que se juntan
y se rascan el dorso de la panza
con el piso treintaiseis
de la puta torre ángela;
que cuando dios
te saca fotos polaroid
y te ciega con los flashes
se ve salir la gente
de abajo de los puentes
(del alvear o del antártida)
a buscar un sitio más arriba
para arrastrar sus colchas,
sus colchones
y sus lágrimas;
vos que sabés
que las pibas que caminan por la sucre,
por la rioja, por cañada
tan sólo tienen dieciocho o diecinueve,
y que los nenes que yo sé
que se esconden en los caños
a aspirar el pegamento en sus bolsitas
no tienen a la mami
que les dé una cachetada;
vos que lo viste a muñuelito,
a quico o al panzaca
aquí y allá,
pidiéndote volver a la niñez,
la que perdieron
por salir a mendigar de madrugada;
vos que me has visto a mí también
con cajas y cajas sobre el lomo
descargar camiones, de las doce de la noche
a las tres de la mañana;
vos que has visto que la gente que dejé
sigue en ese baile cotidiano
de hacerse mierda la espalda;
vos que entendés aquellas cosas
que yo nunca comprendí
por ingenuo o por pavote,
aquellas cosas que se dicen en un gesto,
en una seña carcelaria;
vos que lo has visto andar en moto
y hoy lo ves pasar
en una silla de ruedas al famoso negro calza;
vos que sabés más que nadie de las cosas de la vida,
que sabés más que ninguna
acerca de las cosas
que no cambian,
dále che, no seas tan frígida,
mi córdoba querida;
cambiá la realidad,
cambiáme el alma!

sueño con almohadas

Posted in Otras cosas, Shéneral with tags , , , , on 28 septiembre, 2008 by nene

 

me recuesto por quincuagésima vez en la silla de mierda del laburo.

pienso que no hay nada mejor que una mirindita de medio y un par de puchos para hacerle un exorcismo a todos los males de este mundo. pienso también que, cuando muera, los médicos forenses se van a volver locos tratando de entender por qué mierda, con los pulmones hechos mierda de tanta nicotina, me puse anaranjado.

una mirindita y un par de puchos para hacerme un exorcismo.

me siento como el culo, como si hubiera estado nadando diez mil horas bajo el sol, sin tomar nada de líquido.
la misma sensación que tuve cierta vez que me deshidraté.
me siento cansado, pesado, hinchado, el cuerpo muy caliente y la misma cosa rara; algo así como el abatimiento, el mismo que debe haber tenido la ‘esa lentísima señora presidente’, mirando desde EUA y por tevé el instante mismo en el que el Cleto se subía a su sillón favorito y se tiraba un par de pedos de colores, jugando por un día a ser el amo.

me siento como el culo. como el culo mismo del Cleto.

en realidad no estoy cansado por ningún esfuerzo físico extremo. en realidad, no duermo como debería. y si tengo la posibilidad de hacerlo, hay otras cuestiones, siempre habrá alguna situación que me ponga la cabeza bien alerta (me despabile), y que haga que ya no pueda volver a dormirme como el médico me manda; mi médico, el burnt out, el que me mira como a un cacho de carne cada vez que voy a verlo (como casi casi todos los médicos, bah).
y no puedo dormir bien.

de verdad. estoy cansado.

pero hay algo extraño en el cansancio que me invade. siento que si ahora mismo me volteara algún infarto o un ACV, no habría infierno o cielo para mí. como que si hay dios o diablo que me esperan, ellos ya sabrán que, antes de ponerme a trabajar para agrandar sus patrimonios, tendría que pegarme una siestita de diez años y fracción. y ni dios ni el diablo esperan tanto, cuando de reclutar promotores es la historia.
a decir verdad, ya no sé si de verdad estoy cansado, o en realidad es que estoy enfermo de gripe o algo así.
rarísimo.
la última vez que me pasó algo como lo que estoy contando, se quebró algo entre los sueños y el estar despierto; cosas que había soñado en quince minutos que podía descansar, se entreveraban con lo que estaba sucediendo en la vigilia, y si bien no estuvo bueno ése grado de cansancio, por lo menos ya puedo decir también que sé lo que es soñar despierto 😛
y si de soñar despierto se trata; yo te puedo decir que ando por la vida soñando con almohadas.

y en una mirinda naranja acompañada de un par de lucky strikes.